Fan-fic. Pequeños detalles.

PEQUEÑOS DETALLES

-Lo siento... es que le echo mucho de menos- Dijo Katina arrepentida de su acto. Se apartó lentamente para que no se notase su nerviosismo.
-No pasa nada mi niña- Respondió el chico, y no dudo ni un segundo en abrazar a Katina. Un abrazo se estaba fundiendo entre ellos dos.-No me has de pedir perdón-

-Si... porque tu estas con Gin- Dijo reprochando. Puso sus morritos para hacerse la culpable, esos que tanto le gustaban a su amigo.

-Katina, en serio, ¿yo me he apartado?- Hache vio como la chica negaba con la cabeza. Estaban los dos sentados en unas escaleras, uno al lado de otro y la chica estaba con la cabeza apoyada en el pecho del chico tras ese abrazo.-Si yo no hubiera querido besarte, me hubiese apartado y lo sabes bien tu que yo no me corto- Dijo con una sonrisita. La chica se levantó de golpe.-Sé que lo echas de menos, y yo también. Y si necesitabas un beso o algo, yo te lo hubiera dado- Dijo otra vez serio.

-Muchas gracias Hache- Dijo secándose algunas lagrimas y sorbiendo los mocos. De repente, el chico empezó a llorar. Primero unas lágrimas casi invisibles. La chica se dio cuenta y esta vez fue ella la que abrazó al chico.

-Eh, eh, eh, Hache... relájate, el tiempo irá tapando nuestras heridas- Dijo la chica con un hilo de voz.

-Pero es que él era el puto amo, y todo fue por mi culpa- Dijo llorando esta vez a moco tendido.

-No fue tu culpa, fue culpa de la payasa esa...- Refiriéndose a Babi. Katina estaba ahora mas cabreada que nunca con su ex-mejor amiga, nunca le perdonará lo que hizo, mas bien lo que no hizo. No estuvo allí para apoyarla tras la muerte de Pollo y pasó de toda su gente.

-Pero yo la quería, pero la cagué, y, en la fiesta, la cagué aún mas...- Dijo desconsolado, mirando a Katina.-Y no fui a la carrera. YO TENIA QUE CORRER, NO ÉL- Katina se conmocionó tras lo que estaba diciendo y no podía soportar ver a su amigo así.

-Hache, ahora tienes a Gin, Pollo siempre lo tendrás en el corazón, por lo menos yo si, y espero que tu no te olvides de él. Tu eres muy fuerte y sé que ahora no te vas a venir abajo- Y luego depositó un beso en su mejilla, y le hizo una pequeña sonrisa tras aquel río de lágrimas.

-Grácias- Dijo Hache recuperándose. Katina le volvió a regalar una sonrisa.

Esas cosas que te hacen recuperarte de un bajón, o de una pelea. De aquellos amigos que siempre estarán allí. Esos besos, caricias, abrazos que hacen sentirte mejor, y que te los da tu mejor amigo valen oro. Esos pequeños detalles que siempre los agradecerás.